Arrendar un vehículo es una opción que en los últimos años se ha sumado a la lista para tener un automóvil a bajo costo. Como en cualquier cuestión financiera, tiene sus propias ventajas y desventajas que pueden variar según los objetivos de cada consumidor.
En Finhabits queremos que tomes decisiones financieras más conscientes sobre este tema en dos sentidos primordialmente:
- ¿Es mejor arrendar un auto que comprarlo?
- ¿Qué debo hacer cuando se termina mi contrato de arrendamiento?
¿Es mejor arrendar un auto que comprarlo?
A diferencia de las propiedades, que suelen apreciarse con el tiempo, los autos son de los artículos costosos en el mercado que suelen depreciarse rápidamente desde el primer año de su compra. De ahí que muchas personas decidan tener un vehículo a su disposición por medio del arrendamiento.
De manera muy básica, es primordial que las personas estén conscientes que el arrendamiento funciona de manera similar que cuando rentas una propiedad: al final del contrato, no eres dueño ni tienes derecho alguno sobre la propiedad.
En el caso de los arrendamientos de vehículos, el concesionario brinda opciones de compra preestablecidas en el contrato al final del periodo de renta. Esto significa que, al final de tu arrendamiento, puedes comprar el auto con un precio fijado previamente en tu contrato o simplemente dejar la unidad y seguir con tu vida.
Ventajas de arrendar un auto
Una de las principales ventajas y por las cuales cada vez más consumidores se suman al arrendamiento de un automóvil es el hecho de que los pagos mensuales son más bajos que si financiaras la compra. Esta ventaja, al mismo tiempo y dependiendo de tus objetivos personales y financieros, puede convertirse en una desventaja, ya que todos estos pagos no brindan capitalización sobre el vehículo, ya que al final del arrendamiento no te conviertes en dueño.
Para algunas personas, ser dueño de un vehículo no es su prioridad y, por el contrario, lo consideran como una oportunidad para estar actualizados con un auto nuevo cada cierto tiempo. Esto quiere decir, pasan de un arrendamiento a otro cada dos o tres años, según su contrato.
Asimismo, muchos autos nuevos tienen una garantía cubierta de por lo menos tres años, esto quiere decir que, si tu contrato de arrendamiento es del mismo tiempo, no debes preocuparte por gastos imprevistos de mantenimiento, ya que las reparaciones del vehículo podrían estar cubiertas por el mismo concesionario. Es como cuando rentas una propiedad y se avería la tubería, el dueño es el responsable de correr con ese gasto. Así con el auto de arrendamiento.
Desventajas de arrendar un auto
Como se dijo en las ventajas, aun cuando podrías pagar menos mensualidades en un arrendamiento, este dinero parece ir a “un barril sin fondo”, ya que al final del contrato de arrendamiento no tienes ningún derecho sobre el vehículo como sí lo tendrías en tus pagos mensuales por el préstamo de compra de un auto.
Si tienes el objetivo de mantener un vehículo a largo plazo, tal vez sea conveniente pagar por la compra de un automóvil que por el arrendamiento. Mientras con el arrendamiento no tienes que hacer un pago inicial, hay algunas tarifas que debes solventar, como la tarifa de adquisición o mejor conocida como tarifa de iniciación de arrendamiento que eleva los costos de tu contrato.
En otras palabras y pensando en el futuro, tal vez te convendría desembolsar dinero en un único pago inicial y mensualidades por una unidad que al final será tuya que tener mensualidades y tarifas relativamente más bajas, pero que a largo plazo no van a ningún lado, ya que el auto no será tuyo.
¿Qué debo hacer cuando se termina mi contrato de arrendamiento?
En la mayoría de las ocasiones esta pregunta no tendría cabida, debido a que el auto se devalúa. Sin embargo, actualmente, debido a la inflación y la falta de inventario de nuevos modelos en los concesionarios en Estados Unidos, los precios de los autos usados han aumentado su valor a la venta. En pocas palabras, podrías contemplar la posibilidad de comprar la unidad al final de tu arrendamiento, revenderla y obtener una pequeña recuperación del gasto que tuviste al rentarla.
Si tu contrato de arrendamiento está por concluir, eso quiere decir que el precio de compra fijado que se estimó para estos momentos podría ser mucho más barato de lo que el mercado actual supone. Según datos de Kelley Blue Book, un automóvil usado promedio en EE.UU. se vendió por $28,205 dólares a finales de 2021. Eso es un 28% más alto que el año anterior y un sorprendente 42% más elevado que en diciembre de 2019.
El automóvil usado promedio se vendió por $27,246 dólares en marzo, siendo el tercer mes consecutivo de reducciones de precios. A pesar de ello, los precios siguen siendo históricamente altos, un 14.1% más que en abril de 2021.
En pocas palabras, quiere decir que hoy más que nunca es rentable vender un auto usado. Esto es especialmente importante para aquellos que están por concluir con su contrato de arrendamiento.
Por ejemplo, quizás comenzaste tu arrendamiento de tres años en junio de 2019 por una unidad con un precio de $20,000 dólares en aquel momento, y una estimación de costo fijado para este junio de 2022 en $10,000 dólares. Si las estimaciones son correctas, tal vez podrías vender la unidad por un costo mayor y recuperar parte del dinero que diste entre las tarifas y las mensualidades del arrendamiento.
Si quieres verificar el precio de tasación de tu vehículo en la actualidad, puedes ingresar a sitios como Kelley Blue Book, AutoTrader y Edmunds, que ofrecen herramientas para confirmar cuánto costaría tu vehículo actualmente por medio del número de identificación del vehículo o VIN.
Ojo, es importante que en los números que realices para obtener alguna recuperación financiera de tu arrendamiento, tomes en cuenta las tarifas de adquisición que has pagado, mismas que podrían recortar cualquier ganancia esperada en una venta. Además, debes contemplar el tiempo que podrías tardar en vender la unidad. Por lo que si esperas el dinero de regreso muy rápido, es posible que no suceda así.
Ahora, si no está entre tus planes comprar el vehículo, simplemente puedes regresarlo. ¿Pero qué hacer después? Vuelves a tener las opciones de arrendar o comprar un nuevo auto. Sin embargo, debes considerar que, con el actual aumento de las tasas de interés y los elevados precios de los autos, tanto nuevos como usados, quizás podría salirte muy caro adquirir una nueva unidad en estos momentos.
El pago de arrendamiento mensual promedio en febrero fue de $560 dólares, aproximadamente un 19% más que en el mismo mes hace dos años, según Edmunds. Los pagos de un vehículo idéntico al anterior que se devolvió fuera del contrato de arrendamiento aumentaron entre $150 y $200 dólares por mes, señala J.D. Power.
También puedes optar por seguir conduciendo el mismo automóvil sin comprarlo y extender tu contrato de arrendamiento. Para ello, te recomendamos hacer una llamada a tu concesionaria unos meses antes de que expire el contrato de arrendamiento para verificar si tienes esa posibilidad y cuánto cambiarían tus pagos mensuales.
Te compartimos aquí un video donde Carlos García explica la comparación: