En Estados Unidos es una práctica muy común y un trámite muy fácil conseguir créditos de todo tipo. Créditos para tarjetas, para tiendas departamentales, para comprar autos… Las opciones son infinitas. Esto puede ser muy bueno si lo sabes manejar; pero sabemos también de cientos de historias de personas a las que se les hizo fácil pedir y pedir créditos, que terminaron en un espiral de deudas que los llevó a la bancarrota. Esta situación no solo pone en riesgo la estabilidad financiera, sino que lleva a unos niveles muy profundos de estrés y depresión que puede afectar emocionalmente a nuestra familia y círculo cercano.
Por eso, con las deudas, lo mejor es tener un plan. Y el mejor plan es simple: no gastar más de lo que ganas. Es un ejercicio personal donde debemos modificar de raíz nuestro hábitos financieros para no caer a cada rato en el tobogán de las deudas y los intereses.
Así, además de no gastar más de lo que ganas, debes construir otros hábitos que son necesarios para mejorar tu finanzas: 1) hacer un presupuesto mensual, y 2) tener un ahorro para emergencias.
Sin embargo, si te viste en la necesidad de sacar un crédito y te está generando muchas deudas, te diremos cómo puedes consolidarlas. Consolidar es otra forma de llamar a ese proceso que nos facilitará la vida, el cual implica: organizar todos tus pagos mensuales en uno solo. El objetivo principal de la consolidación es ayudarte a pagar de forma estratégica todas tus deudas de una vez por todas.
Hay muchas estrategias que puedes usar para consolidar tus deudas:
- Obtener un préstamo personal para cubrir todas las deudas y quedarte con un solo pago: esto puede funcionar solo si la tasa de interés es menor a la de tus deudas;
- Sacar una tarjeta de crédito, en lugar del prestamo personal y usarlo de la misma manera;
- Pedir un préstamo con garantía inmobiliaria (home equity loan): estos préstamos son muy convenientes porque te ofrecen tasa fija, pero hay que tener cuidado porque si no pagas, pones en riesgo tu casa;
- Ir a una agencia de asesoramiento financiero: hay que buscar las que sean muy confiables y no usen trucos, es común que al inicio te ofrezcan un interés de 0% pero que con el tiempo se dispara a una tasa mucho mayor de la que tenías.
A continuación, te presentamos algunas consideraciones que debes tomar en cuenta al momento de escoger una estrategia para consolidar tus deudas.
1. Las matemáticas deben funcionar a tu favor
Si decides buscar otro préstamo para liquidar las deudas que tenías, es necesario que saques cuentas para que esta nueva opción no te vaya a salir más cara.
Un ejemplo, si tienes dos tarjetas de crédito con deudas de mil dólares cada una (dos mil en total), debes analizar cuál es el interés de cada una. Supongamos que de la primera pagas 15% de interés y de la segunda un 20%: así, pagarías $150 y $200, respectivamente. La suma total de tu interés es de $350.
Por lo tanto, es necesario buscar ese préstamos de dos mil dólares con una tasa fija (esto es muy importante; si no es así, no conviene) cuyo costo sea menor a los $350. Con esa información en tus manos, podrás encontrar la mejor opción para el préstamo y negociar sin dejarte llevar por ofertas ambiguas.
Siguiendo el ejemplo, puede ser uno cuya tasa sea del 12%; así, si el total es 2 mil, solo pagarás $240, en vez de los $350 que estabas pagando. Con esto, cada año, podrás ahorrar hasta $110, que te servirán para invertir en tu fondo de emergencias o de retiro.
2. Hacer un solo pago
El atractivo principal de la consolidación es hacer tu vida más simple. A lo que debes llegar es a que, en tu presupuesto mensual, tengas contemplado solamente un pago fijo para asumir tus deudas.
Esto te ayudará a bajar la presión al momento de liquidar deudas, así como a facilitar la organización de tus pagos. En lugar de tener pagos pendientes con diversas instituciones —donde además varían las fechas de corte—, solo tendrás que cubrir una sola cuenta.
3. Eliminar tarjetas de crédito
Tener tarjetas en la cartera puede representar una tentación de más gasto y de más deuda. Aprender a usar de forma correcta tus tarjetas de crédito, puede traerte beneficios.
Sin embargo, uno de los mejores hábitos financieros que podemos tener es tener un buen puntaje de crédito. Esto nos ayudará, por ejemplo, a encontrar tasas de interés fijas y más bajas. Si tenemos muchas tarjetas y las manejamos de forma desordenada, nuestro puntaje de crédito se verá afectado. Por lo mismo, hay que encontrar un solo camino para pagar y organizar nuestras finanzas, en lugar de que nuestro presupuesto mensual se tenga que ver dividido en muchos pagos pequeños y caros.
Sin embargo, el consejo más importante sigue siendo mejorar nuestros hábitos financieros. De nada servirá ir consolidando deudas cada dos o tres años, si todo el tiempo estamos atados a los intereses y a pagos que podrían servir para invertir en nuestro futuro.
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